CUANDO SABES LO QUE BUSCAS, ENCUENTRAS LO QUE QUIERES

Para emprender, lo primero que debes hacer es analizar y saber qué es lo que buscas, en base a esto, plantea cuales serán tus pasos a seguir para conseguir lo que quieres.

Cuando tienes claro tus objetivos y tus metas es mucho más fácil trabajar en ello, así que toma nota de la estrategia que utilizaras para emprender:

 

Crea una lista con todos tus objetivos: Plasma en esta lista un objetivo general, seguido por los objetivos específicos que te llevaran a lograr el primero.

Desarrolla cada uno de estos objetivos: ¿Por qué? y ¿Para qué?, responde estas preguntas en cada uno de tus objetivos, esto te ayudara a mantener la motivación.

Precisa las ventajas de cada objetivo: Estas serán herramienta fundamental para alcanzar dicho objetivo.

Establece los posibles obstáculos: Una vez conocido los posibles obstáculos que podrías encontrar en el camino, tendrás una idea de cómo enfrentarlos.

Crea un plan: Basándote en los puntos analizados anteriormente, establece cada uno de los pasos a seguir para alcanzar el objetivo.

Desarrolla el plan: Teniendo presente todo lo analizado, cumple con cada uno de los pasos establecidos para desarrollarlo.

 

La mayoría de las personas empiezan un camino sin trazarse una meta, sin establecer objetivos, sin crear un plan. Así como existen otras que no logran alcanzar el objetivo, o en su defecto, lo alcanzan, pero no se sienten conformes con lo que obtienen.

Es por ello que, para emprender, debes trazarte una meta, analizar cuál es tu objetivo principal, desglosar este en objetivos específicos. Así como, conocer cuáles son las ventajas y desventajas de los mismos, y en base a todo esto crear un plan que te lleve a alcanzar tus objetivos.

Esta es la manera como la mayoría de empresarios y profesionales en general han logrado alcanzar el éxito. Si estás buscando emprender y ser exitoso en la vida, debes analizar qué es lo que quieres exactamente.

La clave del éxito se encuentra en la constancia y la dedicación, ser una persona responsable y honesta. No importa cuál sea tu objetivo, procura ser el mejor en lo que haces, esto te abrirá las puertas hacia el éxito y te mantendrá en él.

No importa que consideres que sabes mucho, es importante tener en cuenta que siempre se puede aprender algo nuevo, siempre puedes ser mejor. La diaria autoevaluación nos permitirá día a día fijar estos objetivos, incluso trazarnos nuevas metas.

Si en algún punto del camino llegas a sentir que todo se derrumba, no te asustes, mantente firme y constante, recuerda que el camino será cada vez más estrecho a medida que avanzas de nivel. Nunca abandones la meta por muy difícil que parezca.

Recuerda que solo tú eres responsable de tu éxito, no pretendas alcanzar el éxito a través de otra persona, sin embargo, debes tener en cuenta que el trabajo en equipo es importante.

Por último, ten siempre presente que “cuando sabes lo que buscas, encuentras lo que quieres, así podrás emprender”

 

 

NO BASTA CON PREOCUPARSE, DEBES OCUPARTE Y EMPRENDER

 

Muchas personas pasan toda su vida preocupándose por lo que les gustaría hacer, o lo que deberían hacer, y muy pocas realmente se ocupan de hacerlo.

Primeo que nada, para emprender con solo preocupase no basta, debes tomar cartas en el asunto y ocuparte. Si existe algo que deseas hacer debes analizar todo el panorama, plantearte metas, establecer objetivos y desarrollar un plan.

Mientras tu mente se llena de preocupaciones, tu capacidad de actuar disminuye, porque desde tu subconsciente te estas bloqueando, y eso no te está dejando avanzar.

La preocupación es un sentimiento que en algún momento de nuestra vida nos embarga a cada uno de nosotros, pero es tu decisión si te quieres quedar allí, en el escalón de la preocupación, o quieres avanzar al escalón de la acción.

La preocupación se da cuando algo realmente nos importa, o, dicho en otras palabras, cuando algo nos afecta. Si algo te está afectando, tú eres el único que puede decidir continuar así, o elegir que no te afecte más.

Para emprender, necesitas actuar, necesitas ocuparte y tomar medidas al respecto. Quedándote sentado, sumergido en la preocupación no lograras lo que deseas, única y exclusivamente si te levantas y te ocupas podrás solucionar tus problemas.

Para emprender, lo primero que necesitas es mentalizarte que, si puedes, que eres capaz de alcanzar lo que deseas, y estar seguro de que lo vas a logras. Muchas veces enfrentarte a eso que te preocupa no es fácil, pero si te pones a analizar, si no te ocupas, ese sentimiento seguirá allí permanente hasta que hagas algo al respecto.

Primero debes confiar en ti, esta es la base de un buen emprendedor, cuando confías en ti, y te muestras seguro de ti mismo, los demás comenzaran a notarlo también.

Posiblemente, mientras te ocupas de eso que te preocupaba, el camino no sea fácil, pero si te colocas a pensar, es mejor saber que lo intentaste, y no quedarte con la duda de que hubiese sucedido si lo hubieses hecho.

Por otro lado, debes tener en cuenta, que para lograrlo no basta con intentarlo, también debes dar tu mayor esfuerzo, y ser positivo. De nada servirá si te trazas una meta bajo el pensamiento de que no eres capaz o no eres bueno.

Todos somos buenos, todos somos capaces, todos tenemos la oportunidad, solo que algunas personas tienen mayores destrezas en algunas cosas que otras personas, así como, cada persona tiene una manera distinta de hacer las cosas.

Nunca digas que no puedes, recuerda que los pensamientos y las palabras tienen poder. No hay peor obstáculo que el que nos colocamos nosotros mismos. Si te calificas tú mismo, diciendo que no puedes, que no eres bueno, eso es lo que sucederá, y no es porque no lo seas, sino porque tú mismo te estas limitando con tus pensamientos, y a su vez tus pensamientos limitan tus acciones.

Por último, es importante que recuerdes que “No basta con preocuparse, debes ocuparte y emprender”.

 

 

SER FELIZ TAMBIEN ES UNA DECISION

 

Muchas veces nos limitamos a pensar que solo podemos decidir sobre un trabajo, un viaje o un proyecto, y terminamos olvidando que ser feliz también es una decisión.

Cuando cada acción que realizamos va de la mano con ese sentimiento de felicidad, los resultados son aún mejor de lo esperado, ayudándonos no solo en nuestro desarrollo profesional, sino también en nuestro desarrollo personal.

La mayoría de las veces, nos concentramos en seguir creciendo profesionalmente y nos olvidamos del yo interior, de lo que sentimos, y descuidamos nuestro crecimiento personal y emocional.

No está mal dedicarse a crecer profesionalmente, esto también cuenta, y es fundamental en la vida de todo ser humano, pero por enfocarte en tus metas profesionales, no descuides tus metas emocionales, esto también forma parte del desarrollo de cada individuo.

Perfectamente puedes desarrollarte paralelamente, tanto profesionalmente como personalmente, esto sería lo ideal, mientras te sientas feliz consigo mismo podrás desenvolverte de una mejor manera en tu área laboral.

Cada persona es única y autentica, lo que te hace feliz a ti, posiblemente no es lo mismo que hace feliz a los demás, lo que verdaderamente importa es que sepas distinguir cuales son estas cosas que te generan felicidad a ti.

Debes analizar qué es lo que realmente te hace feliz, esto te ayudara a crecer como persona. La felicidad es aquella que te hará sentir pleno, tranquilo y seguro, es la que te impulsara a emprender, a hacer las cosas, y a realizarlas de la mejor manera posible.

Si estas feliz, te sientes pleno y tranquilo, tu desempeño laboral tendrá mejores frutos, esta será una excelente herramienta para tu desarrollo laboral, ayudándote a crecer profesionalmente día a día, lo cual, te generara felicidad, es decir, este es un circulo, donde un hecho fomenta el crecimiento del otro.

Como puedes ver, la felicidad es la bandera de tus acciones, y solo tú eres el responsable de decidir si deseas ser feliz o dejarla en segundo plano. Recuerda que tú eres el único responsable de hacerte feliz, solo tú tienes el poder de tomar esa decisión.

El peor error que puedes cometer es esperar a que otra persona te haga feliz, tú no necesitas tener a nadie a tu lado para ser feliz, tú eres suficiente para generar este sentimiento en ti. Así como, no necesitas haber llegado a la meta para sentirte feliz, puedes hacerlo mientras caminas hacia a ella.

Nunca esperes a que llegue el momento para empezar a ser feliz, la vida es una sola, y los días no pasan en vano, aprovecha el aquí y el ahora, y comienza a ser feliz desde ya. No necesitas una vida perfecta para sentirte feliz, porque cada situación que vivimos durante este corto viaje llamado vida, es un aprendizaje, y ya esto es motivo de felicidad.

Por último, date la oportunidad de crecer paralelamente, date la oportunidad de desarrollarte profesionalmente y personalmente. Posiblemente la felicidad plena no existe, pero hasta “Ser feliz también es una decisión”.

 

 

BRINDALE LUZ Y ENERGIA A LA VIDA, Y ELLA TE DEVOLVERA LO MISMO

 

Hay un dicho que dice “Uno cosecha lo que siembra”, esto quiere decir, que lo que tú das es lo que recibirás, esto es fundamental para todo emprendedor.

Procura tomar tu vida de forma positiva, alegre y entusiasta, esto te ayudara a mantener un entorno libre de malos pensamientos, un mejor ambiente para desenvolverte de manera tranquila, libre y eficaz.

Se siempre positivo en cada meta que te propongas, esto te dará la luz necesaria para cumplir con la misma. Así como, dispón de la mejor energía posible para que todo fluya adecuadamente.

Si tu vida gira entorno a pensamientos negativos y acciones erróneas, tu emprendimiento se verá afectado, ya que los pensamientos pueden bloquear tus acciones obstaculizando tu camino hacia el éxito.

Trata a la vida como te gustaría que la vida te trate a ti. Si quieres emprender comienza dando lo que te gustaría recibir. Realiza cada labor con buena energía, disposición y motivación, esto hará la diferencia.

Si las cosas no resultan de la manera que tu esperabas, no importa, sonríe y sigue adelante. No importa cuántas veces lo intentes, lo importante es que lo estás haciendo, y estas luchando por tus metas. Es mejor, saber que lo intentaste, a que nunca fuiste capaz de hacerlo, de luchar por tus sueños, por lo que realmente querías y anhelabas.

La mayoría de los caminos no son fáciles, pero en uno queda si te rindes antes de empezar, si te cansas en el camino, o luchas hasta el final por lo que más deseas. La vida es una sola, por ende, tenemos una sola oportunidad para lograrlo, en ti esta, si quieres aprovecharla o desperdiciarla.

No necesitas ninguna otra motivación, la mayor motivación eres tú mismo, si hacerte feliz a ti mismo no te motiva, debes empezar a hacerlo, solo tú eres el responsable de cumplir tus sueños y emprender.

Todas y cada una de las acciones que tomes, debes hacerlas pensando en ti, en tu objetivo, en tu meta final. No veas cuanto falta para alcanzar la meta, disfruta el camino, y hazlo con positivismo y alegría, así disfrutaras mucho más.

No esperes obtener buenos resultados, cuando nos has trabajado en pro a tus metas, estas se logran con constancia y dedicación. El desempeño que tú coloques para lograrlo será proporcional a los resultados obtenidos.

Todo esfuerzo, tiene su recompensa, muchas veces no logramos ver los resultados al instante, porque hay resultados que se observan a largo plazo, pero la satisfacción de haberlo logrado, y de obtener los frutos que se deseaban, no tiene comparación.

Si lo ves como una obligación, entonces no lo veas así, piensa que si estas allí, es por algo, y debes dar lo mejor de ti. Cuando uno da lo mejor de sí mismo, los resultados son mucho más gratos.

Por ultimo recuerda que recibimos lo que damos, es decir, “Bríndale luz y energía a la vida, y ella te devolverá lo mismo”